Interior del hotel Gran Meliá Palacio de los Duques.
© Meliá
La plaza hotelera de lujo en Madrid está que arde, y no precisamente por las altas temperaturas que se soportan ya en la capital. Las compras y las ventas, los cambios de propiedad y el aterrizaje de cadenas que no tenían presencia en España han dado un vuelco al mapa de los cinco estrellas a una ciudad que a partir de este año, y hasta 2019, incrementará bastante el número de camas deluxe disponibles.
Por ahora no hay riesgo de que sea mucha estrella para poco turista. Madrid recibió en 2015 a casi nueve millones de visitantes, un 6% más que el año anterior. La cifra más alta de toda la serie histórica, que toma datos desde 1999. La inversión extranjera también sigue imparable y las principales cadenas hoteleras del mundo tienen a la urbe en el punto de mira.
El primer establecimiento de esta nueva hornada que acaba de abrir sus puertas es el Gran Meliá Palacio de los Duques, erigido en el palacete del siglo XIX que ocupaba anteriormente el hotel Ambassador, en la Cuesta de Santo Domingo, muy cerca del Teatro Real. Pertenece a la marca de lujo tradicional Gran Meliá, de la cadena mallorquina Meliá Hotels International, y ha sido admitido como miembro del selecto club de calidad hotelera Leading Hotels of the World, en el que también se halla el Ritz de París.
El fundador de uno de los mayores grupos hoteleros de China, Wang Jianlin, quiere convertir el inmueble de la Plaza de España en un centro comercial y en un hotel de alta gama. Y sí, mantendrá la fachada.
Su interior tiene como leitmotiv el legado pictórico de Velázquez, y nueve reproducciones de sus obras –sobre todo Las Meninas– inspiran las suites y los espacios comunes. Ofrece 180 habitaciones, amenities de Clarins, dos restaurantes y un spa con rituales orientales.
Otro que se espera como agua de mayo en la capital es el Four Seasons Madrid, aunque habrá que aguantar hasta finales de 2018 para visitarlo. Será el primer hotel de la compañía canadiense en España y forma parte de un proyecto de rehabilitación de siete inmuebles ubicados entre las calles de Alcalá, Sevilla, Plaza de Canalejas y Carrera de San Jerónimo, muy cerca de la Puerta del Sol. Tendrá 215 habitaciones y dará servicio a las 30 residencias que se van a construir en el complejo. Su aterrizaje ha animado a otros inversores internacionales a fijarse en Madrid.
La competencia tiene nombre de letra. Justo al lado del Four Seasons, en el antiguo Hotel Asturias, se instalará el segundo hotel español –tras el de Barcelona– de la marca W, del grupo Starwood. A pesar de haber elegido un enclave histórico en Madrid, se trata de una firma para un público joven y moderno, de las que organizan fiestas en las piscinas de sus hoteles. El de Madrid, previsto para junio de 2019, dispondrá de 141 habitaciones, 20 de ellas suites, y de una suite presidencial que ellos llaman Extreme Wow.
El dueño del cinco estrellas Orfila de Madrid, Gabriel García Alonso, presidente de la patronal hotelera madrileña para más señas, inaugurará un segundo establecimiento de lujo el próximo octubre en la Calle Príncipe de Vergara de la capital. Como su hermano mayor, el Orfila, pertenecerá al estupendo sello de calidad Relais & Chateâux. Será pequeño –36 estancias– y alojará a un restaurante dirigido por un chef con dos estrellas Michelin, según el diario especializado en turismo Preferente.com.
OPERACiÓN PLAZA ESPAÑA
Que si se va, que si se queda, que si vuelve a irse, que no, que al final no… No nos atrevemos a jurarlo, pero parece que el grupo chino Wanda levantará finalmente un hotel de lujo en el Edificio España, que adquirió en 2014 por 265 millones de euros al Banco Santander. El fundador de uno de los mayores grupos hoteleros de China, Wang Jianlin, quiere convertir el inmueble de la Plaza de España en un centro comercial y en un hotel de alta gama. Y sí, mantendrá la fachada.
No será el único enclave de lujo turístico que se levantará en la céntrica Plaza de España. Otro inquilino de alto standing, el VP Plaza España del grupo VP Hoteles, también abrirá sus puertas con 225 habitaciones repartidas en 17 plantas, piscina exterior climatizada, Sky Bar, centro de bienestar y gimnasio. Sus dueños prometen una de las mejores vistas de la capital, y a nosotros se nos hace la boca agua. Podría estar listo para el próximo diciembre.
En 2017, la cadena hotelera española Barceló sumará a su lista de cinco estrellas un hotel de 158 estancias en la Calle Agustín de Foxá. Lo gestionará durante un periodo inicial de 12 años, en virtud de un acuerdo que ha firmado con el propietario del establecimiento, el Grupo Kiss Media, que posee la emisora de radio Kiss FM y que se ha lanzado a la plaza hotelera. El edificio, junto al Paseo de la Castellana, ya está en obras, y antes albergaba otro hotel, el obsoleto Foxa 32. Barceló ya incorporó a su portafolio el pasado enero el hotel Emperatriz, de cinco estrellas, situado en la Calle López de Hoyos.
No nos olvidamos del prometedor hotel de lujo en la histórica Casa de la Carnicería de la Plaza Mayor, cuya gestión se adjudicó el grupo hotelero portugués Pestana. Se trata de un edificio de cuatro alturas coronado por torres angulares en sus laterales, con el último piso en forma de ático y con la planta baja porticada. Están previstas unas 70 habitaciones pero aún no sabemos cuándo verá la luz.
Lo mismo ocurre con el hotel que Florentino Pérez quiere construir en el Santiago Bernabéu. El Ayuntamiento de Madrid considera viable este ambicioso proyecto, que requiere de una inversión de 400 millones de euros y que, además de zonas comerciales y de restauración, permitirá a los huéspedes del hotel ver los partidos desde su habitación. El colmo de los más futboleros.